No me busques en la cruel sonrisa
de un vanidoso señor de la guerra
con gélidas medallas de sangre;
mejor búscame soñando
con un arco iris de esperanza
surcado por la paloma de la Paz.
No me busques en el fragor de la batalla,
asesinando a un ser humano;
allí nunca me encontraras:
búscame hermanado con el hombre
sembrando mil Primaveras libres
sobre este gastado planeta azul.
No me busques en la xenofobia,
en la marginación, en el odio.
en el pútrido aliento de la represión;
mejor búscame en el alma
del inocente al que asesinaron
por invocar la palabra LIBERTAD